El piquete del barrio de Sants reúne a cerca de 200 personas y es perseguido a corta distancia por cuatro furgones de antidisturbios de la unidad ARRO (comandada por elSubinspector Jorge Arasa). Una gran parte de los comercios tienen las persianas bajadas o están cerrados. El seguimiento de la huelga es elevado. Muchos establecimientos ya colgaron ayer un cartel anunciando que secundarían la huelga. Incluso tiene la persiana bajada el establecimiento de reparaciones mecánicas 24h, ubicado en la calle Tarragona, un local que el 29m fue escenario de un enfrentamiento entre los propietarios y los piquetes.